LA
MAGIA DE LA TURMALINA NEGRA
Este
mineral se encuentra comúnmente asociado a los chakras corporales. Su función
principal es equilibrar la energía y proporcionar paz y tranquilidad, además de
protegernos contra las influencias negativas. Y es que sus diferentes efectos
han sido comprobados por diversos estudios, los cuales avalan su efectividad
como un potente catalizador.
En
concreto, la turmalina negra permite desviar las energías bajas, ya sean
propias o externas, evitando que se almacene en el cuerpo. Además, trabaja muy
bien en conjunto, por lo que puede combinarse con otras gemas, como la amatista
y el cuarzo cristal para potenciar sus efectos sanadores.
Por su
composición, frecuentemente se utiliza en limpiezas espirituales, aunque
también funciona para purificar espacios como oficinas, salones, habitaciones o
lugares con ambientes especialmente densos.
Por
ejemplo, si quieres mantener la armonía en un espacio cerrado solo tendrás que
colocar una pieza de turmalina en cada esquina de la habitación y dejarlas
actuar. De esta manera, el ambiente se mantendrá equilibrado.
Otro de
los usos que suele atribuirse a esta piedra es la neutralización de las ondas
electromagnéticas, por lo que puede ser realmente efectiva para los lugares
donde abunden los dispositivos electrónicos, como ordenadores portátiles y
smartphones.
También
disminuye la radiación presente en distintos ambientes y evita que el cuerpo
absorba las ondas electromagnéticas externas.
La
piedra turmalina negra cumple una función específica, y es que ayuda a
transformar energía negativa en positiva, por lo que trabaja como un gran
catalizador. Esta característica la convierte en un potente amuleto que te
protegerá de las influencias negativas y sentimientos indeseados, como la
envidia o los celos.
Además,
trabaja como un poderoso agente desintoxicante, ya que cumple la función de
sanar no solo a la persona que la utilice, sino también al entorno. Dicho de
otra forma, sus propiedades le permiten elevar la conciencia a nivel personal e
interpersonal.
Así que
si quieres vencer tus miedos más profundos y además desarrollar una nueva
perspectiva ante la vida, sin duda esta es una excelente opción.
Este
mineral también puede utilizarse en la confección de talismanes, especialmente
si se le combina con otros elementos, como la plata, y algunos símbolos
sagrados, como el Tetragramatón. En estos casos funciona como un “escudo” de
gran poder contra hechizos y encantamientos.
A nivel
espiritual, es de gran ayuda para mantener a raya a los vampiros energéticos, y
evitará que otras personas absorban nuestras fuerzas. También es de gran ayuda
para transmutar el resentimiento, así como los daños psíquicos de los cuales
podamos ser víctimas.
PROPIEDADES
CURATIVAS
A nivel
curativo, la turmalina negra es de gran utilidad para tratar diferentes
dolencias nerviosas, como la neurosis, el exceso de angustia y comportamientos
obsesivos. Esta lista incluye algunas de sus propiedades sanadoras más
conocidas.
Puede
reducir los ataques de ansiedad y los pensamientos intrusivos, y si se usa de
manera frecuente permite clarificar las ideas y concretar metas de vida.
En el
aspecto físico, este mineral actúa sobre ligamentos, tendones y piel,
protegiéndonos de diversos accidentes. Sobre todo, es un potente amuleto para
prevenir contracturas y distensiones musculares.
Funciona
para aliviar las molestias ocasionadas por la artritis, así como diversas
molestias musculares. También previene la fatiga crónica, como resultado de las
grandes cargas de estrés, presentes en la vida cotidiana.
Cuando
se utiliza en conjunto con el cuarzo rosa y cristal, puede tratar enfermedades
crónicas, como la fibromialgia.
A nivel
emocional, permite controlar los celos, la tristeza y la apatía profundas. De
hecho, es de gran ayuda para tratar la depresión y lograr una actitud mucho más
favorable.
Al
trabajar como un protector de cuerpo y mente también ayuda a canalizar el miedo
y propiciar un estado de ánimo estable.
PROPIEDADES
MÁGICAS
Su gran
potencial energético la convierten en una herramienta transmutadora que,
además, actúa como un efectivo escudo contra la negatividad. Pero también
ofrece otro tipo de beneficios:
Sus
propiedades protectoras estimulan el crecimiento personal, permitiendo la
transformación de diferentes patrones de pensamiento.
Es ideal
para desarrollar las facultades psíquicas y meditativas, además de servir de
guía en los procesos terapéuticos para estimular la claridad de pensamiento.
Puede
usarse como componente esencial en el agua de gemas para trabajar la liberación
espiritual y desarrollar la capacidad de percibir las verdaderas intenciones de
las personas.
También
agudiza la intuición en circunstancias específicas y es de gran ayuda en la
toma de decisiones importantes. En este caso, puedes combinarla con otras gemas
que agudicen tu entendimiento, como la aventurina, bruscita o cuarzo ahumado.
Puedes
potenciar sus efectos protectores y a la vez obtener más energía si la combinas
con el citrino, lo que te ayudará a encontrar un equilibrio entre protección y
regeneración. Ambas son particularmente útiles en los casos en que exista el
desgaste mental o psíquico.
Otro de
sus usos más conocidos es que ayuda a prevenir el mal de ojo, aunque si buscas
convertirla en tu aliada para combatir este tipo de ataque, lo mejor es que la
mantengas fuera de la vista de otros.
Para
una mayor utilidad, se recomienda que esté siempre en contacto directo con la
piel. De esta manera, podrá crear un campo magnético capaz de repeler cualquier
influencia externa.
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